Pícaro, guerrero, mago. Es difícil pensar en un juego RPG
sin pasar por estos conceptos básicos; la piedra angular de los comienzos de
este género. Desde la salida de Calabozos y Dragones en la década de los 70 se
marcó la plataforma o esqueleto del RPG moderno, un juego donde podías tomar
el papel de un personaje y darle forma en base a una historia, a un entorno fantástico.
Ahí es cuando se da más inca pie en como el jugador se desenvuelve con el
juego, el descubrimiento del propio personaje y lo que lo rodea como los
elementos más importantes.
La enorme influencia
de Señor de los Anillosen la época es evidente y se ve reflejada en los
primeros RPG, un grupo de héroes que emprenden una misión épica y apoteósica ambientada
en un mundo de fantasía medieval. Ese es el origen de la trinidad del guerrero,
el pícaro, y el mago. 3 clases básicas que se adhieren perfectamente al jugador
según su manera de actuar, su estilo Y sus gustos. Cada uno solo define una mecánica sino parte de un
comportamiento y una personalidad.
Si tuviéramos que definirlo en una palabra, esa seria
fuerza. Capaz de una gran resistencia cargando hacia el combate directo cuerpo
a cuerpo. Se podría decir que es la clase más sencilla, vas y le cortas la puta
cabeza a tu enemigo con tu arma, sin más. El chiste del guerrero es ir de
frente apoyándote en tu gran resistencia o bien fuerza para superar la
situación porque tú puedes más que ellos. Claro esto no significa que siempre
vas ir de cabeza a una muerte horrible segura, pero siempre habrá una
confrontación directa con algún enemigo. Piensas en cuanto puedes aguantar y
puedes reaccionar ante cualquier situación gracias al tiempo que Te da tu
mitigación del daño. La valentía es lo que define al guerrero y sin lugar a dudas
la primera línea.
Los magos son misteriosos e inteligentes, con la capacidad
de hacer una cantidad de daño brutal a distancia, manteniéndose así lejos de la
batalla. Ciertamente pueden ser la clase más impresionante debido a todo el
poder que conllevan. Incinerando, congelando o acribillando a sus enemigos con
magia, es necesario saber dónde poner el daño para que no puedan llegar hasta
ti. Sin embargo, aunque pueden tener tácticas defensivas, ciertamente son los
más vulnerables porque si llegan hasta ellos sin haber hecho el daño
suficiente, poco pueden hacer después. Por concepto los magos son fuertes
contra los guerreros ya que pueden acabar con ellos antes de que se acerquen y
si se logran acercar, estos no tienen por lo general el daño para un remate
final. Pero también tiene que ver con la situación.
El pícaro (que engloba al asesino y al ladrón) es caracterizado por su astucia, agilidad,
destreza y sigilo. A pesar de que es la clase menos resistente tiene la
capacidad de ocultarse o escapar para no exponerse, en líneas generales es
difícil de usar porque se necesita mucha planificación, habilidad y precisión
en la ejecución de tus acciones. La ventaja del pícaro es que puede hallar una
manera más o menos indirecta de hacer las cosas. Movidos por el oro y la
sangre, fácilmente se acercan a un objetivo gracias a su gran velocidad para
así dar el golpe de gracia. Esto es ventajoso frente a los magos; no les da
tiempo de reaccionar cuando ya es demasiado tarde. Por otro lado son menos
efectivos contra los guerreros ya que no llegan a tener el daño para acabarlo
antes de que el “les corte la puta cabeza”.
Básicamente es como la piedra, papel o tijeras. Pícaro vence
a mago, mago vence a guerrero y guerrero vence a pícaro.
De estas tres clases básicas se han desarrollado un sin fin de subclases que fueron evolucionando y
cambiando depende de cada juego, pero la estructura inicial sigue ahí; véase
Destiny donde ya no hablamos de fantasía sino ciencia ficción o The Elder Scrollsdonde las opciones son tan variadas y bien distribuidas que puedes
mezclarlas y hacer tu propia clase son tus preferencias. Sea lo que sea, las
bases son fundamentales y es importante tomarlas en cuenta. Personalmente mi
clase favorita es el guerrero, reventarles el cráneo a los magos y asesinos cuando
les golpeo una y otra y otra vez con mi escudo con su sangre brota de narices y
oídos, es simplemente… hermoso. Gustaría saber: ¿cuál es la de ustedes?
Sin más que agregar, me despido. Y córtenles la puta cabeza
a sus enemigos.
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